El agua que ayer caía sin cesar hoy ha dado paso a un sol con nubes intercaladas. Día de tregua. Día de paso. Volverá la lluvia como volviste tú aquella noche. Vendrá con fuerzas, anhelando inundar todo lo que se tercie y hará lo que quiera con nosotros.
No hace falta mirar al cielo para saber que puede pasar. Del cielo no se aprende nada. Todo lo que sé es por tu culpa. Aún no me he vuelto loco así que aún estás a tiempo de salvarme. Sabes que puedes hacerlo.
¿Ahora tienes miedo? ¿Vas a dejarme sólo cuando más te necesito? Silencio. Sólo el zumbido cansino del ordenador. Y las teclas.
Llevo casi dos horas si hablar con nadie. Llevo casi dos horas sin tener ningún problema. Las personas dan problemas. Los problemas dan la vida. La vida me la das tú.
Día de tregua. Día de paso. No mires al cielo, piensa en lo que podrá pasar mañana y recuerda que la verdadera vida no está aquí dentro. Y que tú no vales tanto. Y que yo todavía menos.
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