viernes, 6 de febrero de 2009

Sin hacer ruido


Me marcharé sin hacer ruido, con la cazadora llena de tardes, con la certeza de saberme victorioso, con el anhelo de tus labios.
Me marcharé sin hacer ruido, como las libélulas, como el aire rasante que peina a los páramos, como tu sonrisa infinita.
Me marcharé sin hacer ruido, treparé por las hiedras inciertas que alberguen nuevos horizontes, olvidaré todo el daño que te hice, buscaré el modo de no olvidarte nunca.
Me marcharé sin hacer ruido, abdicando de una vez por todas, repasando los tiempos que me diste, sabiendo que ser feliz no es una utopía si se está a tu lado.
Me marcharé sin hacer ruido, a la búsqueda de tu regazo sincero, a la caza de otro sol que me cobije, a la perdición de las noches frías de febrero.
Me marcharé sin hacer ruido, muy lentamente. Pero me marcharé solo. Lo siento. No puedes venir conmigo. Debes quedarte aquí. Escojo a la soledad y ella me escoje a mi. And all the rest is silence...

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