sábado, 18 de julio de 2009

Deserción


Vivir entre las ruinas de un pasado que no te deja avanzar, la piel de la serpiente adherida a los pulmones, la niebla esparciéndose a tu alrededor, cada vez más densa.
Sonríes, me fregas la mejilla con la yema de tus dedos mientras musitas que me afeité ayer por la tarde.

Vivir entre las ruinas del futuro, el vacío que dejan los sueños bajo los párpados, el carraspeo intacto a la mañana, pétalos agónicos que trasnochan.

Tu gesto netamente perfecto, casi imperceptible, y a lejos moran todos los ejércitos de los cuales he desertado para ir a morir en tus ojos heridos de plenilunio.

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