domingo, 12 de julio de 2009

Creencias

Las personas no valemos tanto como nos creemos aún y siendo lo que más vale de la vida. El límite del valor que damos a lo ajeno y a lo propio lo estipula uno mismo basándose en circunstancias, vivencias y valores. A partir de ahí, se crean escalas intangibles y clasificaciones totalmente innecesarias.
No merece la pena creer tanto en los demás porque las creencias referentes a la gente que nos rodea son demasiado relativas. Muchas, incluso, dependen de como te hayas levantado por la mañana. Y, vuelvo a repetirme, no hay que mitificar nunca a nadie. Ni a uno mismo.

3 comentarios:

  1. "Las personas no valemos tanto como creemos aún y siendo lo que más vale de la vida"

    Tú crees?? Yo creo más bien lo contrario, nos damos menos valor del que tenemos.

    No damos el valor que se merece a las cosas, hasta el momento en que estamos a punto de perderlas. Con nuestra vida nos pasa exactamente lo mismo.

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  2. Se tiende a endiosar en exceso a la gente, sobretodo a aquellos que creemos que son insustituibles. Y sí, deberíamos valorar todo en su momento y no acordarnos cuando estemos a punto de perderlo o cuando ya se haya ido. Pero repito, no hay que creérselo tanto.

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  3. Los que se lo creen tanto en realidad son pokos. Aunque nos guste generalizar.

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