Ellos siempre creyeron que yo podía llegar. Yo aún no he llegado pero sé que ellos siguen creyendo que puedo. Si no fuese así, yo no podría ni tan siquiera intentarlo.
lunes, 10 de mayo de 2010
No habrá soledad
Habrá más cenizas que horizonte en la misteriosa playa de los silencios extraviados. La sombra de la última carta que no escribiste jamás. Aún espero que llegues. Habrá sed de sangre, hambre de ratas, uñas que desgarran pupilas, almas huérfanas, aludes humanos, la hecatombe certificada. Putas muertas y playas desiertas. Cristos crucificados. La puerta firme de la casa abandonada. La sonrisa inútil de los bebés que aún nacen para confirmar la voluntad de la naturaleza tozuda. Habrá más cenizas que palabras tras el telón del futuro. Puedo seguir caminando durante mucho tiempo. Me da igual que llueva o nieve. Los pinos pueden morirse pero el bosque renacerá siempre que se lo proponga. Siempre he creído que las cerezas son demasiado pequeñas. Este verano no habrá sequía. Este verano no habrá soledad.
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